la “Neumática” (de “pneuma”, “viento”, que trata científicamente el tema del vacío y presenta los diseños de más de cien máquinas); el “Autómata” (que estudia los mecanismos movidos por acción del aire o el vapor), la “Dioptra” (que contiene indicaciones para el uso de un aparato de nivelación empleado en las observaciones terrestres y astronómicas); y la “Catóptrica” (que trata sobre las leyes de la reflexión).
En la sección 37 de "Neumática" describe el proceso para conseguir la apertura automáticas de las puertas de un templo aprovechando el vapor :
"La construcción de un altar en un templo pequeño de tales características que, al encender un fuego las puertas se abren espontáneamente y vuelven a cerrarse cuando el fuego se extingue".
"Imagine que en el templo propuesto hay un pedestal, A B C D, en el que se ubica un pequeño altar, E D. A través del altar inserte un tubo, F G, cuya extremo F entre en el altar y el extremo G en un globo, H, que alcanza casi a su centro; el tubo debe soldarse dentro del globo en el que también se pone un sifón curvado, K L M. Haga que las bisagras de las puertas se enganchen hacia afuera y los ejes giren libremente en la base A B C D; y desde las bisagras haga que partan dos cadenas que corran juntas, atadas, por medio de una polea a un recipiente hueco, N X, que se halla suspendido (de una polea); mientras otras cadenas, giran juntas alrededor de las bisagras en la dirección opuesta a las anteriores, atadas por medio de una polea a un peso de plomo, que al descender cerrará las puertas. Imagine que la pierna exterior del sifón K L M lleva un recipiente suspendido; a través de un agujero, P, que debe cerrarse cuidadosamente después que haya suficiente agua dentro del globo para llenar la mitad de él. Se encontrará que, cuando el fuego aumenta el calor, el aire caliente en el altar se expande hacia espacios más grandes; y, pasando por el tubo F G dentro del globo, expulsa el líquido contenido en el sifón K L M dentro del recipiente, el cuál descenderá por su peso, halará las cadenas y abrirá las puertas. De nuevo, cuando el fuego se extingue, el aire rarificado escapará a través de los agujeros en el costado del globo, y el sifón curvado, (cuya extremo estará sumergido en el agua del recipiente suspendido) depositará el líquido en el recipiente llenando el vacío creado (...). Cuando el recipiente aligere su peso la puerta se cerrará”.
Como inventor se atribuyen a Herón, además de otros ingenios, una máquina de vapor (llamada “aeolípile” y considerada como la primera máquina térmica de la historia) y un órgano que aprovechaba los movimientos de un molino de viento (“aneumorion”) para producir música. Y como matemático se le reputan una serie de ejercicios de física y mecánica, soluciones algebraicas a las ecuaciones de primer y segundo grado, el cálculo de raíces cuadradas, cúbicas y del área del triángulo en función de la longitud de sus lados. .................
Pero entonces : ¿Por qué teniendo esos conocimientos acerca del poder del vapor, no se construyeron máquinas de vapor capaces de aprovechar esta tecnología hasta 20 siglos después?
Pues porque entonces : ¿Que harían con los esclavos?, la "mano de obra" barata generada por estos, hacía innecesario cualquier avance tecnológico, esto no ocurriría en los Siglos XVII y XVIII con la "Revolución Industrial"
Vía: Egiptomania.com
1 comentario:
Muy bueno, de alguna manera confirma los análisis de Marx y Engels (tan castigados en política, pero geniales).
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